TULA DE ALLENDE, Hgo.- Un reciente estudio elaborado por el investigador Chávez Landeros de la facultad de geografía de la Universidad Autónoma del Estado de México, adscrito al PRONAII de evaluación de riesgo para la salud humana por agentes tóxicos de origen antrópico como herramienta de empoderamiento social llamado Región Estratégica Ambiental, Norte del Estado de México y la Zona Tula de Hidalgo demuestra que del año 2003 al 2013 se ha extraído material pétreo equivalente a más de seis millones de metros cúbicos lo cual equivale al volumen de 19 veces el estadio azteca.
Esto crea un llamado de alerta, pues dentro de las reformas a la ley minera este tipo de material se mantiene con muy poca o nula regulación y el cincuenta y un por ciento del material se extrajo del municipio de Atotonilco de Tula, el veintiséis por ciento en Apaxco de Ocampo perteneciente al Estado de México y el veintitrés por ciento restante en Tula de Allende, Hidalgo.
Así lo dio a conocer, ayer, el investigador quien agregó que las empresas que reportaron mayores cantidades de extracción son Holcim en Apaxco de Ocampo con diez millones de metros cúbicos, Caleras Beltrán cuatro millones, CEMEX con dieciséis millones y esta última empresa no reportó en su totalidad los volúmenes de extracción al Servicio Geológico Mexicano (SGM).
“También se observa que en Tula de Allende solo están reportando dos de los cinco sitios, desde donde se extrae el material pétreo, esto conforme a lo reportado al SGM y lo observado por los mapas satelitales” precisó Chávez Landeros.
El investigador refirió que todos estos datos fueron calculados mediante el uso de imágenes satelitales e información del SGM, por lo que se espera ampliar este trabajo de investigación hasta este año 2023, una vez que las imágenes de satélite de la década correspondiente 2013-2023 pasen a dominio público, sin embargo, lo que los propios habitantes de la región observan es un aumento en la extracción.
Expresó que la regulación tan laxa o la falta de ella, con respecto a la minería no metálica en México es un vacío legal que permite que estas situaciones ocurran.
Así mismo, recalcó, que estos ecosistemas de donde se extrae el material pétreo no pueden ser restaurados ni recuperados por lo que la perdida de la vegetación y fauna es un duro golpe a la región, especialmente en la crisis climática que vivimos actualmente.
“Esta investigación pone las alertas justo en uno de los temas más importantes para la mencionada región, como es la pérdida de hábitats que conllevan con una crisis hídrica como la que se ya está viviendo y que está muy relacionada con la pérdida de los cerros, que son parte fundamental del ecosistema y su patrimonio biocultural” añadió, por último, el informante.