El Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) tiene menor presupuesto, menos derechohabientes y sufre de suministros de medicinas, a diferencia del extinto Seguro Popular, coinciden usuarios y empleados.
Mientras que el Seguro Popular enlistaba a un millón 660 mil personas, el INSABI tiene un potencial de un millón 106 mil 776 derechohabientes, cifra que equivale al 36 por ciento de la población hidalguense que no cuenta con seguridad social.
Este medio consultó con empleados y beneficiarios del INSABI para determinar su efectividad, y ambas partes coincidieron en que, si bien, ahora no existe un catálogo de enfermedades como ocurría con el Seguro Popular y médicamente se cubre todo tipo de padecimiento, lo cierto es que hay déficit de medicamentos e insumos, mismos que al final del día deben ser cubiertos por los usuarios y el gasto no es reembolsable.
Dependiendo de la enfermedad, el gasto de laboratorios, placas, catéteres, medicamentos y otros insumos médicos se puede elevar y debe ser costeado por la familia del paciente, ya que el INSABI solo alcanza para el servicio médico y si acaso para algunas medicinas.
A decir de los usuarios y de los empleados, una receta emitida apenas es cubierta, por mucho en un 50 por ciento o menos, ya que no hay medicamentos; aunado a ello, cuando se trata de cirugías, los insumos corren a cuenta del paciente, tales como mangueras para suero, suero, pañales, entre otros.
Janet, una mujer que recientemente tuvo una histerectomía, platica que de la cirugía no tuvo que pagar nada, “ni un peso”; sin embargo, la mayor parte del medicamento corrió por su cuenta y la de su familia, ya que por lo general no había en la farmacia. Incluso, comenta que acudió por unas pastillas y no había, pero más tarde a su compañera de piso le pidieron el mismo medicamento y resulta que sí hubo, por lo que refiere “es cuestión de suerte”.
El INSABI es un programa de atención para la población sin seguridad social laboral, en teoría, cubre salud y medicamentos de manera gratuita, pero en el caso de Silvia, que cayó y se fracturó un tobillo, no le cubrirá nada porque resulta que al momento de intentar emitirla constancia de no derechohabiencia en el ISSSTE, el sistema cayó y no pudo hacerlo, por ende el INSABI no le podía aplicar, a pesar de que contaba con su anterior póliza del Seguro Popular.
Yolanda, también comparte, que fue a través del INSABI que operaron a su hijo de una malformación en corazón, hecho por el cual guarda agradecimiento, pues no tuvo que pagar nada de la cirugía, pero sí todos los medicamentos.
Cabe señalar, que la cifra de personas sin seguridad social, resulta de sumar a los beneficiarios del IMSS que son un millón 557 mil 723 (899 mil 194 ordinarios y 658 mil 529 Bienestar), así como 338 mil del ISSSTE, y 80 mil 342 de otros como PEMEX, SEDENA, Marina y servicios privados, lo cual da una suma de un millón 976 mil 65 personas afiliadas a algún servicio de salud, de un total de tres millones 82 mil 841 hidalguenses que reporta el INEGI en el último censo.
Es de destacar,que en cuanto a recursos económicos, en 2020, el INSABI operó un total de mil 338 millones 835 mil 391 pesos, ello conforme al acuerdo de coordinación entre el Instituto y el Gobierno estatal. Dinero que se suma a los 145 millones 727 mil pesos que se reciben en materia de transferencia de recursos presupuestarios federales con el carácter de subsidios, para el Programa Atención a la Salud y Medicamentos Gratuitos para la población sin seguridad social laboral.
En contraparte, el Seguro Popular, en 2019, atendía a una población de un millón 661 mil beneficiarios, percibió dos mil 892 millones 516 mil pesos, y se contaba con un abasto de medicamentos de 89.1 por ciento, ello plasmado en el Informe de Resultados del Sistema de Protección Social en Salud 2019.