Miles de hidalguenses que votan son recibidos con una porción de gel antibacterial en el acceso de la escuela, oficina o plaza donde se instalaron la 3 mil 874 casillas que están distribuida en Hidalgo para esta elección con la que se renovarán 84 ayuntamientos.
Ya en mesa directiva indicada, recibe a los votantes su presidenta, pidiendo que el votante muestre su credencial. Uno se la debe de acerar, pues no hay contacto alguno con el plástico.
El nombre es dicho varias veces le la presidenta para que los representantes de partidos políticos en casillas, que rodean a distancia la mesa directiva y la urna y la mampara, busquen ese nombre en el listado nominal que les fue entregado a todos los organismos políticos. El cuadernillo tiene nombre e información de quien vota. Incluso la misma foto de la credencial.
Luego de que representan a los partidos políticos hallan al votante en turno, el ciudadano recibe su boleta y se encamina a la mampara y entra a ese espacio privado donde se decide por quien votar. Algunos llevaron su plumón y lo usan para cruzar, invalidar o proponer a alguien que no está en la papeleta.
Posteriormente hay quienes doblan concienzudamente su voto; otros la medio doblan para que se vea el logotipo cruzado, y salen de la mampara con el sufragio en la mano, listos para dar unos pasos meterlo en la urna de costados transparentes.
Después de ello, se muestra nuevamente la credencial para que el secretario de casilla la marque con una máquina manual, a fin de que no sea utilizada nuevamente este día. Se le aplica al ciudadano la tinta indeleble y de después, nuevamente, otra porción de gel, que con el frote de manos se seca antes de llegar a la salida de la escuela oficina o plaza donde instalaron la casilla.
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