La violencia en el noviazgo puede terminar con un embarazo, afirmó la directora del Instituto Hidalguense de las Mujeres (IHM), María Concepción Hernández Aragón.
En entrevista, indicó que “es una manera en que los hombres le dicen a las mujeres adolescentes, si no tienes relaciones sexuales, pues no tienes un compromiso conmigo no hay amor, como parte del chantaje psicológico”.
Ante un embarazo no planeado, explica, el proyecto de vida de ambos se ve perjudicado, “pero en mayor proporción el de la mujer, porque al final del día el hombre puede o no hacerse responsable de esa paternidad, pero la mujer lleva el producto en su vientre, (…) y cuando nace el bebé obviamente va a estar con ella”.
Si bien, reconoció que hay procedimientos penales para obligar a los padres a reconocer la paternidad y otorgar los alimentos, no son inmediatos, pues llevan sus procesos, ello, sumado a que las redes de apoyo equivocan el actuar, pues en ocasiones deciden sacar a la jovencita de la escuela, lo cual atenta contra su desarrollo personal, y genera que al paso del tiempo, esa mujer no tenga oportunidad de trabajo, y terminará en una dependencia económica hacia pareja.
“Vivirá etapas de vulneración a sus derechos humanos y no va a ser fácil que la supere porque ya formó una dependencia a esa situación y porque ya no tiene una alternativa distinta para ella, para su hijo, para su hija, si no aguantar esas cuestiones de violencia”, explicó.
En el IHM, dijo, se maneja un financiamiento de la federación con el que se trabaja en temas importantes como la prevención del embarazo adolescente, violencia en el noviazgo y la trata de personas.