TULA DE ALLENDE, Hgo.-La Comisión Nacional del Agua (Conagua) había atribuido La inundación que sufrió el municipio de Tula el 6 y 7 de septiembre del 2021, que a, “un evento súbito, incontrolable e inevitable, provocado por una lluvia local”, ahora reconoce que fue provocado por “escurrimientos de los ríos, presas y las obras de desagües del Valle de México y del estado de Hidalgo,”. Conociendo la causa y con la certeza que puede volver a ocurrir hay un debate serio sobre cual es la solución.
La Conagua dio a conocer, en noviembre del 2021 que, del 6 al 7 de septiembre, el caudal del río Tula estaba a 500 m³/s, cuando el afluente solo tiene capacidad natural para dar cauce a 250 metros cúbicos por segundo, de los cuales 150 m³/s provenían de las descargas de Ciudad de México, 92 m³/s de la cuenca propia del Tula y el resto, del río El Salto y el desfogue de la presa Requena.
Y que el 7 de septiembre por la tarde la situación se agravó porque el caudal enviado llegó hasta los 610 m³/s, de los cuales 209 m³/s provenían de los túneles Central y Oriente.
El informe también refiere que en el Atlas de Riesgos de Hidalgo del 2019 se había señalado la probabilidad de una posible inundación en la zona ya que desde su planeación en 2008 el Túnel Emisor Oriente (TEO) fue diseñado como una alternativa para evitar las inundaciones en la Ciudad de México y zonas conurbadas, al duplicar la capacidad de drenaje de la Cuenca del Valle de México, pues enviaría las aguas residuales a la planta de tratamiento de Atotonilco de Tula.
Para evitar nuevas inundaciones la Conagua diseño “El Plan Hídrico para Tula” que comprende acciones a corto y mediano plazo tendientes solo a ampliar la capacidad del río.
Entre los trabajos comprometidos, se encuentran el desazolve, ampliación y revestimiento del Río Tula, la implementación de un protocolo de operación conjunta para el Sistema Hidrológico del Valle de México y el estado de Hidalgo y colocación de estaciones de medición automática en la cuenca del Río Tula.
El proyecto va retrasado. Los trabajos de desazolve aún no han comenzado. La ampliación y rectificación del cauce no presentan gran avance, aún no se concluye la ampliación del puente Zaragoza y deben ser intervenidos tres puentes.
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Las 20 organizaciones civiles que integran el movimiento “Ciudadanos al rescate de Tula”, entre ellas La Gran Asamblea de Damnificados de Tula 2021, Unidos por Tula, y la Red de Conciencia Ambiental, se han pronunciado en contra de la ampliación y rectificación porque ello les da la certeza que Conagua pretende seguir enviado toda el agua de la ciudad de México y Valle de México al río Tula y por supuesto en contra del revestimiento porque quieren un rio vivo.
Especialistas entre ellos Dean Chahim, quien realizó una investigación posdoctoral en la universidad de Princeton sobre el Sistema de Drenaje del Valle de México, quien estuvo en Tula el pasado 26 de agosto, pasado Herminio Morales González y Carlos Paillés, señalan que una solución a las inundaciones del Valle de México sin sacrificar a los municipios de la periferia es ampliar la retención de las aguas, en los vasos reguladores del Valle de México.
Carlos Paillésha planteado para quitarle presión al río Tula durante las épocas de lluvia, la urgencia de desazolvar las presas Requena y Endhó pues asegura ya perdieron capacidad de captación de agua. Ya realizó estudios y presentó un plan. Y Andrés Noé Paz, propuso la construcción de un libramiento hidráulico.