A causa de la crisis sanitaria, el ecosistema económico de la capital atraviesa por una reestructuración en la que muchos negocios que cerraron durante la fase más crítica de la pandemia, cambiaron de giro, o bien, redujeron su tamaño para subsistir.
Así lo expresó en entrevista el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) Pachuca, Eduardo Iturbe Méndez, quien recordó que debido a las complicaciones generadas por el Covid-19 la ciudad pasó de 180 mil a 136 mil unidades económicas.
No obstante, destacó, las 44 mil que murieron a causa de la pandemia, ingresaron a una fase de recomposición motivada por espíritu emprendedor de sus propietarios y como parte del proceso de recuperación económica.
“Lo que está pasando es una restructuración del mercado o del sistema económico de la ciudad, aquel que tenía un negocio mediano, hoy abrió uno pequeño, aquel que rentaba en una calle comercial, hoy abrió en su casa, eso es lo que está pasando y es parte de la recuperación económica porque muchos ya tienen la infraestructura, la mercancía y solamente están haciendo una nueva adaptabilidad de su actividad económica”, recalcó.
De acuerdo con el dirigente señaló que por el momento, es probable que para esos establecimientos la actividad no sea tan boyante, sin embargo, destaca el impulso de emprender, crecer y recuperar el momento en el que se estaba.
Por otra parte, indicó que las personas que perdieron su empleo tras ser liquidadas de un negocio o empresa, optaron por dedicarse a alguna actividad económica, “entonces quienes en pandemia iniciaron con un experimento como nenis, o con una cajuelazo, ya se están está estableciendo de una manera más estructurada”.
Iturbe Méndez precisó que actualmente los emprendedores se han inclinado por giros dedicados a los servicios personales, como es el caso de aquellos que se dedican a poner la colocación de uñas, belleza, cosméticos, accesorios y pastelerías.
Con su visión coincidió Héctor Bautista, vicepresidente de Comercio en Pequeño de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo, quien puntualizó que varios negocios que eran muy grandes “migraron a cambiar de giro”.
“En tanto, la gente que quedó desempleada, optó por la venta de diversos productos de marcas famosas, hasta la apertura de tiendas de abarrotes con el dinero que recibieron de liquidaciones”, dijo.
La venta de ropa y la prestación de servicios que incluso se pueden hacer en casa son las alternativas más socorridas, “estas son alternativas cuando al final del día no alcanza para la renta de los locales”.