Al aseverar que Hidalgo no escapa a los nocivos efectos del gradual calentamiento del planeta, registrando olas de calor de hasta 43 grados en la Huasteca, la experta en medio ambiente, Ninel Escobar Montecillos, anticipó que la humanidad tendrá que adaptarse a ese calentamiento, pero al mismo tiempo debe encontrar fórmulas para bajar las emisiones de bióxido de carbono a la atmosfera, por parte del transporte, que es el principal contaminante en México.

Lo anterior al participar en el Foro Medio Ambiente y Cambio Climático, en la Cámara local de diputados, al conmemorarse ayer, el Día Mundial del Medio Ambiente.

El primer panel del foro organizado por diputados de la Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático, que preside María Luisa Pérez Perusquia, se denominó “La Política Nacional de Cambio Climático”, y reunió a tres expertos en materia medioambiental, los maestros Ninel Escobar, Roberto de la Maza Hernández, así como el doctor Andrés Flores Montalvo.

Abordaron las políticas de adaptación a los efectos nocivos del cambio climático, la política de mitigación de gases y compuestos de efecto invernadero, y, la legislación nacional en la materia, apoyándose en imágenes, cifras y estadísticas, ante nutrida concurrencia de escolares y servidores públicos.

También la bióloga Brenda Luna González y la maestra Krishna Karthik Tangirala Venkata, dictaron las conferencias “El papel de las comunidades indígenas ante los desafíos de la pérdida de biodiversidad”, y “Medición de la calidad del aire a través de nano sensores: una política ambiental.

Carlos Samayoa Robles, Violeta Carrasco Gallegos y Martha Monterrubio Hernández, disertaron en el panel “Impactos y alternativas de incineración de residuos urbanos”.

En su discurso de bienvenida, acompañada sus homólogos Víctor Trejo y Areli Miranda, la diputada María Luisa Pérez alertó sobre el grave problema de contaminación ambiental que afecta a millones de personas.

“Es culpa de la actividad humana, principalmente por quemar combustibles fósiles, como petróleo y carbón en el transporte y la industria, la emisión de gases efecto invernadero, lo cual propicia sequías extremas y olas de calos, lo mismo que lluvias excesivas y fuera de temporada”, se señaló.