Pese a las protestas de gaseros ocurridas en el Valle de México, en Hidalgo el servicio opera con normalidad.
De acuerdo con un sondeo realizado entre comisionistas por este diario, no existen planes, al menos en lo inmediato, de llevar a cabo una suspensión del servicio en lo local, aunque también siguen a la espera de un acuerdo con el gobierno federal.
De acuerdo con un repartidor dedicado a la distribución del energético en la modalidad de cilindros en la zona metropolitana, específicamente en Zempoala, “no van a caer en el juego, ni en provocaciones”, de manera que continuarán trabajando con normalidad.
El pasado 3 de agosto, gaseros de Pachuca y Mineral de la Reforma se sumaron a un paro de labores junto a los del Estado de México, Tlaxcala, Veracruz y Puebla en protesta contra el tope de precios impuesto por la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
De acuerdo con lo expuesto por los distribuidores, el control de precios afectaba directamente el margen de utilidad que reciben por la venta del energético cuyo uso es básico para las familias y diversas actividades económicas.
A través de la protesta, buscaban un acuerdo con el gobierno federal para obtener mayores ganancias por su trabajo, sin embargo a la fecha, no ha sido así.
Por lo anterior, el pasado lunes tuvo lugar una nueva movilización, a la que ya no se sumaron los hidalguenses.
La tarde de ayer, el gremio gasero nacional dio a conocer que a partir del martes pararon de manera no definida LA venta de gas en el Valle de México.