El puente atirantado que se construye en la intersección de los bulevares Felipe Ángeles y Luis D. Colosio en Pachuca, tiene un avance del 72 por ciento y los cables que sostendrán dicha obra son importados de Eslovaquia y Francia.
Actualmente el material se encuentra en los talleres de la empresa contratista. Los cables tienen una longitud variable de 19.20 metros a 67.21 metros; así como una tensión que se mide en Unidad de Coma Flotante, por sus siglas en inglés FPU de 18,966 kg/cm2, informó la Secretaría de Obras Públicas y Ordenamiento Territorial de Hidalgo (SOPOTH).
Cada uno de los cables de acero, llamado entre los profesionales de la construcción Torón de Tirante, estará ensamblado por tres materiales en fábrica: 7 alambres de acero galvanizado, vaina individual de polietileno de alta densidad y cera petrolífera.
Los cables, que son 40 divididos en 10, serán soportados por cuatro mástiles de 25 metros de altura. En total son mil 850 toneladas de acero.
La ejecución de la misma inició el 13 de enero de 2020 con una inversión de más de 402 millones de pesos. El nuevo puente considera más de 560 metros lineales y seis carriles, tres por cada sentido norte-sur.
La obra tuvo retraso debido a la pandemia por Covid-19 debido a que Francia y Eslovaquia detuvieron la producción de los implementos que se utilizan en esta obra de Pachuca. Se prevé que en abril de este año inicie su funcionamiento.
El pasado 28 de noviembre fue reubicada, en su mismo sitio pero en la parte baja, el monumento Miguel Hidalgo, uno de los más representativos en la entidad, para seguir con las maniobras del puente, cuya obra significará la conclusión de la Súper Vía Colosio, con la modernización de Pachuca y su zona metropolitana.
Se define como puente atirantado como aquel cuyo tablero se encuentra suspendido y ligado por medio de tirantes a uno o varios pilones que soportan el tablero mediante cables.