Yasmin Saldaña González, coordinadora de Ecología en Apan, señaló que derivado de un trabajo colaborativo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo, a través de su Dirección de Calidad del Suelo, retiraron y darán un correcto destino final a 2 mil llantas que se encontraban acopiadas en un predio perteneciente al vivero municipal.
La funcionaria indicó que, estos neumáticos fueron recolectados desde la administración pasada con el objetivo de que se les diera un destino sustentable; sin embargo, desde hace aproximadamente tres años permanecían en este espacio en el que se busca recuperar la flora local.
Por ello, mencionó, luego de establecer comunicación con el organismo estatal, se acordó la recolección de las ruedas de caucho evitando con ello la posibilidad de un incendio y la proliferación de fauna nociva.
Explicó que, los 2 mil neumáticos serán enviados, a su vez a una empresa autorizada para su disposición final, actividad con la que, además, dijo, se busca evitar que las llantas acaben en canales, terrenos baldíos o rellenos sanitarios y con ello contribuir a que se les dé un destino final sea sustentable.
Indicó que esta acción es parte de una de las actividades alternas que maneja este departamento, para la basura que no es posible desechar en un camión compactador y con ello se impida que acabe en sitios inadecuados donde puede contribuir a crear focos de infección, generar el desarrollo de ratas e insectos, así como incendios.
Refirió que la mayoría de los neumáticos oscilaban entre las medidas de rin 13 y hasta 24 por lo que, para su transportación fue necesaria la utilización de un tractocamión con caja tipo seca.
Indicó que, en su conocimiento, la mayoría de estas llantas, fueron acopiadas a través de una campaña realizada por la pasada administración denominada “Rueda Verde”, que, aparentemente inició en 2019, y en la que, se estima se lograron captar alrededor de 5 mil llantas, con el apoyo de la ciudadanía y la aplicación de algunas estrategias como la recolección directa en talleres mecánicos y vulcanizadoras.
En otro sentido, indicó que, darles un destino final implica la prevención de que en estas se acumule agua donde se incuban vectores transmisores de diversas enfermedades.
Finalmente, también indicó que con ello se evita que durante la temporada de quemas agrícolas se afecte directamente al ambiente y se provoquen incendios de grandes dimensiones, puesto que además de ser un elemento altamente inflamable una vez encendido es difícil apagar.