El confinamiento causado por la pandemia de Covid-19 ha causado un problema de socialización entre los menores de edad que no han convivido con infantes de su edad en etapas fundamentales para la interacción social, lo que se reflejará en la adultez, consideraron especialistas en terapia infantil.
Clara González Garnica, terapeuta pedagoga infantil, refirió que entre los cuatro y seis años de edad es una edad en la que la escuela se convierte en un espacio de socialización para los seres humanos, por lo que el cierre de las escuelas impactó en su capacidad de relacionarse y por ello con las reaperturas paulatinas de los planteles no se han adaptado en su totalidad.
La especialista en trastornos infantiles sostuvo que el confinamiento inhibió la capacidad de generar relaciones sociales para los infantes que no pudieron convivir con las personas de su misma edad, y por ello tendrán dificultades mayores para generar relaciones duraderas tanto en la adolescencia como en la adultez.
Mencionó que si bien los confinamientos impidieron la propagación del coronavirus, también generó mayor ansiedad y depresión en la población infantil, razón por la cual ejemplificó que el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés) estima un incremento en problemas de salud mentales para las siguientes generaciones por la pandemia.
En tanto, Ismael Gutiérrez, abogado y defensor de las infancias, recalcó que los problemas de socialización para los infantes no han sido considerados por las autoridades estatales y federales, pues con los cierres de los planteles la adaptación para la convivencia infantil se ralentizará.
De la misma manera, el especialista en derechos humanos consideró fundamental generar una política pública integral que garantice la readaptación de los menores en etapas fundamentales para su desarrollo social y la capacidad de interactuar con otras personas de su edad.
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El estudio Nivel de Calidad de Vida de la Infancia elaborado por la Unicef refirió que en aquellos países donde el cierre de las escuelas fue más prolongado los efectos de la convivencia entre los infantes serán más visibles en los siguientes cinco años con una problemática recurrente para generar interacciones sociales.