El director ejecutivo de Servicios de Inclusión Integral y Derechos Humanos (Seiinac), Rafael Castelán Martínez, condenó el acto de violencia en el que el ex alcalde de Atotonilco de Tula y ex diputado federal por el distrito de Tula, Julio César Ángeles Mendoza, fue señalado de mandar golpear a un comunicador y arrebatar el teléfono a una reportera, así como todos los caso de este tipo que se han presentado.
Agregó que "condenamos el hecho no solo contra estos periodistas sino contra cualquier medio de comunicación y, desde luego, llamamos a la manifestación pública de estos organismos en todos los caso de violación de derechos humanos que se mira desde redes sociales", con los pasos de investigación correspondientes a la comprobación plena de los hechos.
Consideró que si llega una persona y hace una agresión o no permite una entrevista o peor aún manda golpear, como en este caso el expresidente, no solamente es lamentable y reprobable, reprochable, entonces autoridades tendrían que estarse manifestado, denunciando.
Señaló que nuestros organismos cómo la Comisión de Derechos Humanos tendrían que estarse manifestando para seguir las quejas de oficio.
"A nosotros nos preocupa mucho que estos casos pareciera que son aislados pero no lo son. De repente parte de un discurso que ya se ha ido construyendo a nivel nacional en contra de los medios de comunicación y desde luego en la libertad de expresión", dijo el activista.
Explicó que lo que sucede es que se va limitando ese derecho a la libertad de expresión y pues eso es, primero reprobable porque ninguna autoridad, en el ejercicio de su propio poder o sintiéndose ostentada con ese mismo poder, tiene el derecho de agredir a ninguna otra persona y mucho menos cuando se trata de un medio de comunicación que lo que está haciendo es buscar la información para dar a conocer a la ciudadanía "porque la ciudadanía tenemos derecho a saber y los medios de comunicación son el medio que ayuden a que ese derecho se garantice".
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Sobre la Fiscalía para Delitos contra Periodistas y Defensores de Derechos Humanos que permanece acéfala opinó que tendría que estarse nombrando una persona o asegurar que los procesos estén funcionando porque en muchos casos no están las personas titulares pero los procedimientos funcionan.
"La persona puede removerse, cambiarse, no estar pero si el proceso funciona entonces cualquier situación de agresión contra periodistas puede iniciarse... si no está la cabeza hay un equipo de personas".
En el caso de los policías municipales que agredieron a una joven manifestó que también debe haber pronunciamiento por parte de derechos humanos y del ejecutivo.