El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que con la coquizadora de Tula, que será concluida y puesta e marcha hasta diciembre de 2023, el país será autosuficiente en la producción de gasolina y diésel, respetando las normas internacionales de no producir azufre ni generar combustóleo.
En su recorrido por la refinería Miguel Hidalgo, asentada en Tula, que formó parte de su gira por Hidalgo de este sábado, el mandatario federal fue acompañado por la secretaría d Energía, Rocío Nalhe; el director general de Pemex, Octavio Romero, y del gobernador Omar Fayad. Ahí subrayó la importancia para su plan de autosuficiencia energética, la nueva coquizadora que se construye.
Fue Rocío Nalhe quien explicó, con orientación y apoyo López Obrador, que en este sexenio se invirtieron más de 400 millones de dólares, mientras que en el anterior mil millones de dólares, así como que este proyecto se espera terminar en diciembre de 2023, con un calculado de 2 mi 500 millones de dólares como inversión extra.
Además, apuntó que esta coquizadora tiene una capacidad para procesar 85 mil toneladas de combustóleo, siendo el de esta planta de Tula y el proveniente de Salamanca los que serán sometido a un proceso tipo craqueo, con el que se obtendrá un 45 por ciento más de gasolina y diésel.
Con ello, además de dejar de producir azufre, se cumplirá con normas internacionales y se dejará de comprar gasolina y diésel en el extranjero, complemento López Obrador, quien luego pidió a Nalhe informar datos de empleos por esta obra. La funcionaria señaló que por ahora se generan 2 mil 500 y en el mayor pico del proyecto serán más de 9 mil directos, todos, según dijo, en Tula.