ALTIPLANO DE HIDALGO. - Revaloran la gastronomía local y lacustre a través del libro Murmullos y Sabores de la Laguna de Tecocomulco, una obra con la que se busca que los platillos nativos, pero también la flora y fauna entorno a uno de los humedales más importantes del país prevalezca.
Miguel Ángel Monroy, cronista de Tepeapulco, señaló que la obra partió del deseo de homenajear a su madre, quien aprovechando lo que la naturaleza le brindaba aprendió decenas de recetas, muchas de las cuales llegaron a la actualidad de boca en boca, por las pobladoras en torno a la Laguna de Tecocomulco.
A través del texto, el escritor da cuenta de la vida cotidiana en el humedal con lo que busca no solo rememorar el pasado de esta localidad, sino también, dijo, “Fomentar el sentido de pertenencia y exaltar la memoria histórica”.
Mencionó que a través de su obra busca también revalorar a la mujer de las comunidades por las que atraviesa este espejo de agua. “Es un agradecimiento a mi madre, que como muchas otras se las ingeniaron para elaborar la comida con lo que se encontraba en la Laguna, era la única forma de alimentarnos”.
Señaló que en el documento también refleja esa transmisión del conocimiento culinario, a través de las manos y la mente de las mujeres en las que, aseveró, sus sentidos les dicen cuánta sal, cominos, epazote debe llevar la comida.
Explicó que el texto además incluye una compilación de diversas recetas entre las que destaca la preparación de consomé de hueva de carpa y ancas de rana, ensalada de berros y ranas con nopales en salsa verde, por lo que se convierte en una obra que rescata la cocina lacustre.