Como parte de una política de equidad en materia de campo, hombres mayores de 65 años podrán heredar a las mujeres de su familia parcelas y, a su vez, convertirse en ejidataria y hasta ser representantes de núcleos ejidatarios.
La nueva política impulsada desde nivel federal ordena que la propiedad sea 50 por ciento para mujeres y la otra mitad, hombres. Anteriormente, era 60 y 40, detalló Andrés Velázquez Vázquez, delegado de la Procuraduría Agraria en Hidalgo.
Las instituciones involucradas para desarrollarlo son la misma Procuraduría Agraria, el Tribunal Agrario, Registro Agrario Nacional y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU). Se implementará sobre todo en las zonas con mayor arraigo en herencia hombre-hombre. Tal es el caso de Huejutla, Ixmiquilpan y municipios que integran la Otomí-Tepehua.
“Busca impulsar un mejor esquema de desarrollo para los sujetos agrarios, a los jóvenes y mujeres receptoras de los derechos agrarios que se generaron con sus padres y abuelos. De esta manera, puedan ser partícipes de la política del campo”.
Explicó que se han identificado 200 núcleos agrarios donde las mujeres participan en sector turístico, como en la elaboración de alimentos, artesanías y otros servicios que prestan.
También se desenvuelven en ejidos con vocación forestal como la fabricación de muebles y otros productos. “Están saliendo muchas mujeres que participan activamente en la economía de la entidad y con potencia en materia agraria a nivel nacional”, dijo el procurador agrario.
En Hidalgo existen mil 171 núcleo agrarios, el último en crearse fue en Agua Fría Chica, en Jacala, donde el gobernador Julio Menchaca Salazar, entregó mil seis hectáreas. Esto contribuye a la política agraria federal y estatal en apoyo a los ejidos y comunidades, el cual equivale al 65 por ciento de la entidad.
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