Octaviano Bravo Morales, quien fuera expulsado como socio de la Cooperativa Cruz Azul luego de pedir cuentas claras a Guillermo Álvarez Cuevas, sedicente director general de la empresa cooperativa hizo un llamado para que se cumpla con la resolución emitida en el juicio ordinario mercantil del segundo distrito de lo civil.
En conferencia de prensa, explicó que todo comenzó en el año 2011, cuando él y otro socios de la cooperativa exigieron rendición de cuentas a Guillermo Álvarez, quien después de esa escena comenzó a tomar represalias en contra de los quejosos.
Primero los excluyó de las reuniones hasta lograr sacarlos de la cooperativa y dejarlos sin derecho a las prestaciones, junto con sus familiares.
“Los quejosos fueron separados de su salario y de la planta, así como sus los familiares fueron despedidos de manera arbitraria y para desistir de la lucha fueron acosados en su patrimonio”, explicó.
Sin embargo, en 2016, la juez Elizabeth Vargas Lira, del juzgado primero de distrito en materia Civil del Distrito Federal, les da la razón y ordena a la Cooperativa Cruz Azul la restitución de sus derechos, sentencia que a la fecha no ha sido ejecutada.