A menos de una semana de que empiece la fiesta patronal en la colonia Rojo Gómez por la conmemoración del Señor de la Misericordia en la parroquia del mismo nombre, trabajadores de diferentes gremios dedican todos los días una celebración religiosa para bendecir sus labores y a sus familias. Así ocurrió el domingo con los camioneros, el lunes con trabajadores de la construcción y la tarde del martes con los mecánicos, vulcanizadores, rectificadores, muelleros, eléctricos, 'chasiceros', reparadores de autos, entre otros del mismo giro.
El padre Félix, quien por cierto cumplió años este martes y agradeció durante la misa por doce meses más de vida, informó que el festejo de la comunidad inicia el próximo viernes, por lo que en días previos dedican jornadas de oración: seguirán las costureras, los profesionistas, etc. El punto de reunión fue una pequeña capilla dedicada al Señor de la Misericordia ubicada en la calle Sonora, de ahí caminaron al menos 20 personas rumbo a la iglesia.
"Ustedes mantienen y reparan por lo que les pedimos a nombre del Señor de la Misericordia que mantengan unida a su familia, esa es su primera tarea. Si en algún momento algo se ha descompuesto en su familia, sean los principales reparadores de ello. Mantengan y reparen su corazón, manténgalo limpio y puro", expresó el párroco durante la homilía, luego de dedicar una ronda de aplausos para los trabajadores, quienes acudieron en compañía de sus familias. Hubo incluso quienes uniformaron a sus hijos e hijas con playeras rotuladas con el logo de su negocio.
Además, el sacerdote abundó en que "hay muchas cosas que se están descomponiendo en nuestro mundo, en nuestra sociedad y en nuestra colonia, ayúdenos a repararlo con sus valores y voluntad. Que el Señor de la Misericordia los colme de abundantes bendiciones y les conceda un corazón enamorado de nuestro señor Jesucristo", para después pedir otra ronda de aplausos.
Finalmente, precisó que además de las misas diarias, el próximo viernes inicia la feria patronal, que alcanzará su punto máximo el siguiente domingo con presencia de monseñor Domingo Díaz Martínez, Arzobispo de la Arquidiócesis de Tulancingo. Durante ese fin de semana además de juegos mecánicos y venta de alimentos, también habrá teatro del pueblo y bailes sonideros para deleitar a los pobladores de esta colonia.