Al comparecer ante la Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático, de la legislatura local, Raquel Ramírez Vargas, encargada de despacho de la secretaría del ramo en el gobierno estatal, destacó el trabajo que en Hidalgo se realiza con 17 objetivos de un Plan Estatal, sin soslayar los problemas que se enfrentan por contaminación en aire, agua, basura.
Modernizar el Sistema de Monitoreo mediante equipos analizadores, señaló, permitió identificar la alta presencia del contaminante de material particulado pm 2.5, en la zona metropolitana de Pachuca, ello motivó su inclusión en el programa de contingencias ambientales atmosféricas de esta región.
Ahora este programa atiende a tres contaminantes: ozono, pm 10 y pm 2.5, y su cobertura no sólo se acota a Pachuca y Mineral de la Reforma, se extendió a los municipios de San Agustín Tlaxiaca y Zempoala, actualización publicada en el Periódico Oficial, en la que se establecieron medidas más estrictas, expuso.
Informo que se decretó el Corredor Biológico del Puma en la región montañosa de Actopan, con más de 9 mil hectáreas, los cual representa el 56% de la superficie protegida de competencia estatal y municipal, y es el primero en su tipo a nivel nacional como categoría estatal de conservación.
La creación de 3 instrumentos indispensables para la gobernanza ambiental: la Estrategia Estatal de Biodiversidad, el Estudio de Estado y la Comisión Estatal de Biodiversidad; organismo que desde ahora coordina las investigaciones y acciones en materia de patrimonio natural.
El trabajo internacional para la integración de la biodiversidad en la agricultura en Hidalgo; apoyada, técnica y financieramente por la Agencia de Desarrollo Alemana (giz)
También la maestra Ramírez Vargas, informó que presentaron ante la Semarnat federal, la Agenda Ambiental de la región Tula, documento base para lograr el programa de restauración ecológica en dicha región.
Por primera vez, la CAMe autoriza 5 proyectos para Hidalgo, por un monto superior a los 20 millones de pesos, para la realización de estudios técnicos; 4 de ellos de agua y uno de aire, manifestó.
Se realizó la fumigación en 21 comunidades ribereñas de la presa, en los municipios de Tula y Tepetitlán. Por primera vez esta acción se realizó de manera integral, es decir, al interior del cuerpo de agua, a lo largo de 45 kilómetros del litoral, en 200 hectáreas de campo y en más de 4 mil hogares, trabajos avalados por el Cenaprece, que determinó una efectividad en el control de mosco del 93.05%.