Mario César Acosta abre la brecha en Costa Rica, donde acaba de ser contratado por la Liga Deportiva Alajuelense, club de Primera División, desempeñándose como auxiliar del argentino Andrés Carevic.
Esta dupla lleva varios años trabajando en conjunto. Empezaron justamente en las fuerzas básicas de los Tuzos, antes de ir a Mineros de Zacatecas, en el Ascenso MX, donde estuvieron tres torneos. Calificaron dos veces a Liguilla, como líder y sublíder de la campaña regular. Arañaron el campeonato para llegar al máximo circuito.
La aventura en Zacatecas acabó y en cuestión de horas les llegó la invitación al balompié tico, donde serán presentados en unos días.
Con 22 años de experiencia, Mario se forjó en todas las categorías de las inferiores del Pachuca, siguiendo el proceso de varios chicos que ahora triunfan en México y el exterior; además, estuvo en Rayados de Monterrey y también pasó año y medio en Argentina.
“Agradezco la confianza de Andrés Carevic para empezar esta nueva aventura. Voy con mucha ilusión de trabajar fuerte y demostrar que tenemos la capacidad de que la Liga Deportiva Alajuelense sea un cuadro competitivo”, mencionó el pachuqueño, hijo de un ex tuzo muy recordado como Cesáreo Acosta.
De esta forma el Club Pachuca demuestra el trabajo que realiza no solo con jugadores que se han formado en el plantel y que tienen ya presencia en diferentes clubes a nivel nacional e internacional.