Representantes de equipo y directiva de la Liga de Futbol Premier de Veteranos de Tulancingo, se quedaron sin acuerdos con el grupo de árbitros que la sanciona, luego de los hechos violentos contra dos de sus integrantes a finales del año pasado, por lo que persisten las complicaciones para conformar el rol de juego de los domingos.
El presidente de la liga, José Luis Sánchez, señaló que los árbitros hicieron una petición formal donde pedían garantías económicas, las cuales iban desde los mil 500 a los cuatro mil pesos, aproximadamente, dependiendo del tipo de agresión que sufrieran durante los partidos.
Sin embargo, al exigir los representantes de equipo, en retribución, una mejor preparación, capacitación constante y, a su vez, garantías de un trabajo digno por parte de los silbantes, no se llegó a un acuerdo y se determinó continuar este domingo con un rol reducido en cuanto a sedes, debido a la falta de árbitros.
Sánchez reconoció que el arbitraje en términos generales en la región, pasa por un mal momento, ya que no hay la capacidad necesaria, no hay apoyo entre el gremio ni profesionalización de este trabajo, que cobra entre 300 y 400 pesos por partido.
Actualmente, la liga tiene seis árbitros, pero buscará en los próximos días contratar, por lo menos, dos más; además, buscará apoyarse con ligas locales como la de Cuautepec, para que los árbitros puedan cubrir partidos en este municipio, por poner un ejemplo.
“La situación nos está afectando y lo estamos sufriendo, sobre todo por los equipos que juegan de locales en donde no tenemos doble programación, porque es desperdiciar un árbitro para un solo partido, sobre todo en liga premier, porque ya no les da oportunidad de trasladarse a otra cancha para un segundo juego”, concluyó.