La preseleccionada nacional de karate Sachiko Paulina Ramos Akita puso Una pausa en su proceso olímpico para convertirse en madre, aun así, no pierde la esperanza de conseguir una de las tres plazas para Tokio.
En entrevista para la Comisión Nacional Cultura Física y Deporte (Conade), la jalisciense indicó que existe una fuerte competencia en el equipo femenil de karate, pues para el Preolímpico de la disciplina, donde se buscarán los boletos a tierras niponas, solo hay tres lugares, en los -55, -61 y +61 kilos.
“Yo creo que es más difícil lograr el lugar aquí en México, porque son tres divisiones y somos muchas candidatas; en el caso de que en el proceso me fuera mal, lo entendería y apoyaría a mis compañeras en el Preolímpico", dijo.
Ramos Akita comentó que tuvo que poner una pausa en su carrera deportiva, por lo cual salió de la concentración de la preselección nacional de karate, que se realizaba en ese momento en las instalaciones de la Conade.
Señaló que su embarazo fue tranquilo, “no tuve ninguna complicación, mis papás me cuidaban mucho por lo mismo de la pandemia, no salí para nada de la casa, pero estoy muy feliz por esta nueva etapa de mi vida. “Hablé con la Federación para salirme del proceso, me regresé a mi casa a Guadalajara, Jalisco, para mis revisiones y seguir con todos los cuidados que necesitaba.
“En marzo, que empezó todo lo de la pandemia, me entero de que a mis compañeros los regresaron a sus casas, que ya no hay concentración, que cambiaron los fechas para el Preolímpico y para los Juegos Olímpicos, así que, pensé que a lo mejor sí todo sale bien y me recupero rápido, la Federación me daría permiso de regresar al proceso”.