Son 15 años los que han pasado, el 13 de diciembre del 2006 Pachuca escribió con letras de oro su nombre en los libros del fútbol internacional y se convirtió en el primer equipo mexicano y único hasta el momento en ganar un título internacional a nivel de clubes fuera de la zona de Concacaf.
Con goleadas, los Tuzos comenzaron a sembrar su camino hacia el título al dejar en el camino a equipos como Deportes Tolima de Colombia, Lanús de Argentina, Atlético Paranaense de Brasil y en la final se encontró con Colo Colo de Chile que dejó en semifinales a Toluca.
CORREA
A 15 años de este logro, Jaime Correa, uno de los jugadores que ganó la Sudamericana y que hoy es director técnico de las Tuzas, señaló estar más que contento y satisfecho por haber entrado dentro de la historia del Club Pachuca, “fue un acontecimiento que marcó al futbol mexicano, y desde ese entonces, seguimos como el único equipo mexicano en ganar el torneo de otra Confederación lo cual es muy importante”.
En respuesta a que le haría falta a Pachuca para regresar a ser protagonista, Correa comentó: “el hecho e ir consolidando el grupo poco a poco en la cuestión de no hacer tantos movimientos de jugadores, el hecho de ir haciendo un buen 11 como en general un buen plantel que detrás de los torneos no cambie mucho, que de alguna forma sean pocos los cambios que haya en cada semestre.
“Creo que, si se parte de esa situación, a futuro podemos volver a ser protagonistas dentro del fútbol mexicano, esperemos que así sea, es lo que deseamos todos los que somos Tuzos de corazón”.
LA IDA
El partido de ida se jugó en el Estadio Hidalgo y Pachuca de la mano de Enrique El Ojitos Meza se enfrentó a un equipo con figuras de la talla de Humberto Suazo, Arturo Vidal, Matías Fernández y Alexis Sánchez.
El colombiano Andrés Chitiva marcó el primer gol para los Tuzos y provocó un estallido de alarido en el Huracán, Juan Carlos Cacho tuvo la oportunidad de ampliar la ventaja y la desaprovechó, el representativo chileno igualó el marcador por conducto del Chupete Suazo y el marcador no se movió más.
LA VUELTA
El partido de vuelta definió el resultado, los Tuzos se metieron al Estadio Julio Martínez Prádanos con un lleno total que ensordecía e intimidaba a propios y extraños. Esta no fue la excepción para que Miguel Calero saliera previo al partido a calentar los ánimos de la afición y echarse al equipo al hombro.
“Miguel salió para intentar recibir el grito de la gente de Colo Colo de Chile para prender y tratar de calmar un poco los ánimos.
“Miguel hacía su parte, tenía liderazgo y la facilidad de encender la parte de que nosotros también estábamos ahí. Físicamente era una persona imponente, cuando vas a jugar una final y contra un equipo como estos, tienes que hacer fuerza con todo y Miguel sabía lo que nos jugábamos y lo que él representaba para el equipo” comentó Chitiva.
Humberto Suazo provocó un pandemónium al marcar el gol de la diferencia que le daba la ventaja a los locales, se abrió a su costado derecho para generar un espacio y mandar el balón pegado al poste de El Cóndor que no pudo evitar la caída de su marco en el primer tiempo.
Gabriel Caballero se encargó de marcar el empate en el complementario tras un centro de Gerardo Rodríguez, cerró la pinza y mandó el balón al fondo; minutos más tarde Chitiva mandó un centro para Christian Giménez que con un derechazo sentenció el marcador a favor de los Tuzos por 1-2 en el partido y 2-3 en el global.
CHITIVA
Al respecto, Chitiva platicó: “en ese tiempo teníamos un equipo compacto, muy organizado y con una experiencia importante. Habíamos tenido dos oportunidades de jugar la Libertadores que nos había ido muy bien y esta era como una parte importante que necesitaba el Club Pachuca y para nosotros también.
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“Con Calero teníamos una comunicación constante dentro y fuera de la cancha, siempre pensando positivamente, de ver que este torneo era el de nosotros, nuestra oportunidad de poder lograr algo a nivel internacional que se nos había negado, y así lo hicimos desde el comienzo, era un reto para nosotros, era un objetivo clarísimo, el más importante que teníamos hasta ese momento. Ya habíamos tenido un par de Mundial de Clubes, más complicado, un torneo más difícil”.
Andrés señala que, sin duda, sabían de la importancia que tenía en ese momento la Sudamericana y la dificultad a la que se enfrentaban por ser un equipo mexicano que era bastante incómodo para los equipos de Sudamérica.