Guillermo Ochoa es un portero seguro, pero cuando falla, lo hace de manera tremenda.
Uno de sus notables problemas a lo largo de su carrera es que cuando tiene un error, incide directamente en el marcador y así fue este sábado en el partido del Standard Lieja.
Una vez más, el guardameta mexicano se equivocó en una salida y regaló un pase al contrario, situación que lo dejó mal ubicado para que el jugador contrario rematara de larga distancia y así empatar un partido que iban ganando.
Posteriormente, Ochoa salvó su marco y al momento el Standard está empatando a un gol ante el Truidense al medio tiempo.