Moscú.- Con la imponente estructura de un gladiador de 24 metros, el estadio Spartak le da la bienvenida a todos los aficionados. Este escenario que parece haber sido construido para auténticos guerreros, servirá para la presentación en el Mundial, de uno de los mejores jugadores del mundo: Messi.
Aquí, además del Argentina-Islandia de mañana, también se enfrentarán Polonia y Senegal el 19 de junio, Bélgica y Túnez, el 23 y Serbia-Brasil a efectuarse el día 27.
Este escenario es casa del equipo más popular de Moscú, curiosamente tiene los colores rojo y blanco. Fue un club que se fundó en 1935 y que tardó en tener su propio escenario y eso generó pique con otros clubes como el Dinamo y el Lokomotiv porque llegaban a compartir el mismo escenario como sucederá el próximo torneo en México con América y Cruz Azul.
Es un estadio nuevo, que tardó varios años en construirse por problemas económicos. La obra quedó concluida en el 2014. Tiene capacidad para 45 mil aficionados, aforo que será insuficiente para ver a Messi en acción contra Islandia.
El estadio Spartak también es conocido como la Otkrytie Arena y fue sede de la Copa Confederaciones 2017, por lo que para algunos equipos es un escenario conocido pero recibir una Copa del Mundo, y más a un jugador como Lionel Messi, es lo mejor que le puede pasar a este escenario en su corta historia.