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“¡Te queremos, Checo, te queremos!”. Los gritos de guerra en apoyo al piloto mexicano Sergio Pérez se transformaron en un rugido de aliento al unísono. Ni la incesante lluvia pudo silenciar los cientos de aficionados que se congregaron a las afueras del Museo Soumaya para recordarle a su ídolo que puede más el amor de su gente, que las críticas y la discriminación que ha sufrido a lo largo de una fatídica temporada en la Fórmula 1.
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Y el tapatío lo sabe. El próximo fin de semana correrá en el Autódromo Hermanos Rodríguez cobijado por todo un pueblo dispuesto a desgarrar sus cuerdas vocales con tal de devolverle esta confianza que parece haber perdido tras un año en el que se convirtió en el más señalado de la grilla en el Gran Circo. Antes, ya había pasado unos días en Guadalajara, Jalisco, con su familia para recargar energías, y un día después, se dejó consentir por quienes lo admiran y han apoyado lo largo de su carrera en las pistas.
“Agradezco a la afición por el cariño dado incondicionalmente, a demostrar que somos la mejor afición del mundo. Son momentos muy especiales que se van muy rápido. Quiero disfrutar del Gran Premio, porque se va muy rápido y quiero disfrutar este momento en mi carrera. Hemos vivido años inolvidables y la afición ha sido de primera desde que llegué a la Fórmula 1 y han sido momentos muy especiales que se viven”, dijo el jalisciense de 33 años de edad en conferencia de prensa celebrada en Plaza Carso.
La presión ha sido insoportable y el oxígeno se agota lentamente en el sofocante ambiente de la máxima categoría del deporte motor. Y es que aunque actualmente ocupa el segundo lugar de la clasificación en el Campeonato Mundial de Pilotos, h sido severamente cuestionado por su irregular desempeño. Con 240 puntos, Pérez Mendoza tiene 39 unidades más que el británico Lewis Hamilton, que con 201, acecha al mexicano sigilosamente, situación en la que no estaría inmerso de no ser por errores puntuales que le han costado puntos a lo largo del año.
“Sí, diría que sí ha sido la (temporada) más complicada porque pelee por el campeonato. La gente nunca entenderá lo que es manejar un auto a 300km por hora y no saber cómo se comportará el auto y qué pasará. Fueron buenos y malos momentos en el año. Diría que es la temporada más dicil en lo mental, siempre tuve dudas en muchos momentos con el auto”, reconoció Sergio Michel.
“Pero lo importante es enfocarte en tu trabajo, siempre van a hablar bien o mal, pocos pilotos llegan a generar eso cosas buenas y malas y no lo veo mal. Al final del día cada piloto genera emociones en su gente, al final nos quedaremos con los recuerdos de todo esto y hay que disfrutar porque esto dura poco”, añadió.
Checo es actualmente el único piloto latinoamericano de la parrilla. De hecho, de los 867 pilotos que han participado en la Fórmula 1 a lo largo de su historia, solo 74 han sido de Latinoamérica, cifra que se traduce en tan solo el 8.5 por ciento del total. Si bien, el serial surgió en Europa, las críticas a Pérez han sido más marcadas que con otros pilotos, siendo esto un reflejo del rechazo que existe en el Viejo Continente hacia otros sectores raciales.
“No es importante (las críticas), para mí lo importante es lo que puedo controlar enfocarme con mis ingenieros y el equipo al final sabe dónde estoy, en mi nivel como piloto y lo que les puedo dar y es así todo el año. Una mala carrera eso no me quita ni un poco de mi energía, son cosas que no puedo cambiar. Al final son muchas cosas que se especulan en el mundo Fórmula 1 y esta temporada he aprendido a enfocarme en lo que puedo controlar, en ser mejor piloto, lo demás sale sobrando, lo que importa es lo que haga en pista con mi equipo”, explicó.
En el Gran Premio de Qatar a principios de octubre, Sergio Pérez fue eliminado en la Q2 durante la sesión clasificatoria y el domingo finalizó décimo en un fin de semana de terror en el que, además, chocó en la sprint race del sábado y fue sancionado por montones. Con ese recuerdo aún fresco, el mexicano deberá apretar el botón de reseteo y no mirar atrás para no volver a caer en viejos errores.
“Después de Qatar, en mi peor fin de semana, estuvimos trabajando y hubo progreso bueno. En Austin no lo pudimos demostrar por el Sprint que se atravesó, le pasó a Mercedes y Ferrari, son decisiones rápidas que debes tomar”, explicó. “Venimos en plena temporada, el equipo siempre para igual, tenemos muchas carreras al año y las preparamos igual, para mí (México) es la más importante porque es en casa”.
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Recién el fin de semana pasado, durante el Gran Premio de Estados Unidos, el mexicano inició su carrera número 253 en el Gran Circo, con lo que logró colarse en el Top 10 de pilotos con más participaciones en F1. El tapatío dejó atrás al italiano Jarno Trulli, quien corrió en 252 ocasiones. A Checo lo superan Riccardo Pastrese (256), Felipe Massa (269), Sebastian Vettel (299), Jenson Button (306), Michael Schumacher (307), Rubens Barrichello (323), Lewis Hamilton (328), Kimi Raikkonen (350) y Fernando Alonso (374). Una muestra más de su inconmensurable talento.
“Nunca lo hubiera pensado llegar a estar en el top 10 de Pilotos con más carreras y no lo hubiera pensado ni en el mejor de los sueños, estar en F1 durante tanto tiempo es algo inigualable”, comentó con una sonrisa. Ahora, es tiempo de seguir haciendo historia. ”Toda mi familia estará el fin de semana y me gustaría ganar ante mi gente”, puntualizó.
Publicado en Ovaciones
