Cuatro integrantes del Club Hidalgo Condor, Pablo Padilla, Adriana Chávez, Lucero Padilla y Adriana Chávez, conquistaron le Pico de Orizaba, la montaña más alta de México (5,700 metros sobre el nivel del mar), con el glaciar más grande, en una ardua jornada que duró 18 horas y media.
A las 00 horas iniciamos el recorrido regresando al campamento a las 18 horas, con la emoción de haber conseguido el objetivo, señaló Pablo Padilla, experimentado escalador.
Muy bien en el arranque, la parte física atlética de parte de los muchachos, se comportaron a la altura, nos mantuvimos compactos con otros escaladores extranjeros, el grupo en chorizo, así le llamamos al ascenso.
El grupo de hidalguenses abordó el glaciar Jamapa alrededor de las 5 de la mañana a una temperatura de menos 17 grados, pero al amanecer el cambio térmico siempre es más frio llegando a los menos 20 grados.
Para ese momento ya estaban bien equipados con los trompones, piolets bien puestos y encordonados.
Esta ocasión tres escaladoras hacían el Pico de Orizaba por vez primera, una chica se sintió mal, “No siento los dedos”, con la experiencia, Pablo la revisó, observó que los tenía rojos, sólo los frotó y siguieron avanzando. Y le dijo, “Aquí la resistencia mental influye mucho”.
Más arriba el hielo estaba muy negro y duro como piedra, extremadamente difícil de escalar, pero un día antes cayó una nevada y eso nos favoreció, dice Pablo Padilla.
Para nosotros es muy significativo como montañistas, alcanzar nuestras metas, señaló el experimentado alpinista.
