/ domingo 25 de diciembre de 2022

Varios años hubo una Carrera de Autos entre Omitlán y Real del Monte

El Hill Climb Pachuca era una carrera de automóviles que se desarrollaba cada año y participaban autos de las mejores marcas y pilotos profesionales. Coches como los Buick, Ford, Dodge, Chevrolet, MG, Alfa Romeo, Studebaker, Ferrari, Maserati, y pilotos como Maglioli, los Hermanos Pedro y Ricardo Rodríguez, Moisés Solana, Phil Hill, FelicciBoneto y otros. Desconozco el porqué se suspendieron estas carreras que además de ser atractivas desde el punto de vista deportivo, le daban gran difusión promocional turística a la región y principalmente a Real del Monte.

La subida desde Velazco a Casas Quemadas es una carretera muy sinuosa pero tiene la característica de que está muy bien trazada. Fue hecha por técnicos mexicanos de la entonces llamada SCOP. Recuerdo el trágico accidente en la Panamericana de FeliciBoneto, italiano que pegó contra una banqueta en Silao Gto., de ahí derrapó, chocó y encontró la muerte. En la carrera de Real del Monte no había estos problemas por su trazo y porque era de subida; los autos pugnaban por ir rápido pero la cuesta arriba y las curvas no se los permitían.

Las personas que asistíamos a contemplar la carrera nos apostábamos a las orillas de la misma, con cierto peligro, como sucede siempre, de que un auto se vaya sobre la gente. Otras personas, veían la carrera en la larga curva en donde está la Mina –ahora museo- de La Dificultad, ya que la curva es prolongada y amplia y permitía ver desde que los autos venían de lejos y luego de la curva se podía contemplar su entrada a la recta larga al principio del bosque del Hiloche. En una ocasión, por 1955, un realmontense se subió a un poste de energía eléctrica para ver mejor la carrera, enfrente de La Dificultad y por una imprudencia, tocó cables de corriente y quedó pegado y no podía bajar, sólo gritaba. El incidente que nos ofreció un espectáculo más, afortunadamente sin heridos, sólo con un gran susto.

Mucha gente venía de la Ciudad de México y de otras ciudades del centro del país como Puebla, Querétaro, Tlaxcala. Todo empezaba desde el sábado en que se hacían pruebas y preclasificaciones; la gente se quedaba a dormir en Pachuca, o acampaba en la cercanía en los bosques. Por supuesto que la carrera duraba toda la mañana del Domingo y es que los autos no salían de la meta juntos, sino por turnos y su clasificación dependía del cronómetro, así que cada auto pasaba solo y antes hacían varias pruebas, así que desde como a las 10 am empezaba uno a oír el rugir de estos coches de carreras que era la delicia sobre todo de los niños que ahí nos apostábamos desde temprano. Para las 2 de la tarde, la carrera había terminado y el ganador hacía su recorrido con la bandera de cuadros .

Qué tal si se volviera a realizar esta carrera? Sería un plus para los enormes atractivos que tiene esta hermosa zona del Estado de Hidalgo que hemos llamado El Corredor de la Montaña. Ya está, solo faltan los corredores y los autos.