El buen juez por su casa empieza, reza un refrán popular, y considero que está ad hoc al actuar del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien desde que lo conocemos repite constantemente su discurso de austeridad, de "honrosa medianía", así como su crítica a los actos de corrupción, pero no logró permear en su hijo José Ramón López Beltrán, quien a sus 40 años de edad vive en una residencia lujosa en Texas con todas las comodidades, incluso con cine y alberca.
Sin que nadie lo cuestionara sobre la investigación de Mexicanos Unidos Contra la Corrupción y la Impunidad y la Agencia Latinus, el presidente solo atinó a decir que "la señora tiene dinero" y con "la señora" se refiere a Carolyn Adams, que en este caso es la nuera del presidente.
Sin embargo, es difícil no pensar que la relación padre e hijo, sea el vínculo con la empresaria petrolera que es a lo que se dedica "la señora".
Además, de acuerdo con la investigación Pemex firmó un contrato con la Petrolera texana Baker Hughes, y es precisamente uno de los presidentes de la compañía, el dueño de una de las dos casas que se exhibió ha vivido el hijo del señor presidente, a pesar de todas las enseñanzas de su padre relacionadas con la austeridad.
"En este gobierno no tienen influencia mis hijos", ha afirmado López Obrador, pero no creemos en sus palabras, cuando los hechos revelan otra cosa. Cuando el presidente logre convencer a los suyos de su propio discurso, será el día en que quizá le podamos creer.
El doble discurso, a tres años de gobierno, es más que evidente, no mentir, no robar y no traicionar al pueblo se vuelven palabras huecas, cuando este tipo de actos salen a la luz, porque en este gobierno se ha venido demostrando que si roban, si mienten y si traicionan al pueblo.
Ojalá que el presidente acepte la creación de una comisión que investigue a sus hijos, ojalá solicite a las autoridades que investiguen a su hijo para que eventualmente le finquen responsabilidad o lo deslinden de ellas. Eso se lo debe a los mexicanos, ir a fondo en el combate a la corrupción, se trate de quien se trate, así sea uno de sus hijos. Y así demostrar que el buen juez, por la casa empieza.
